Puede que alguna vez nos hayamos encontrado en la situación de tener que elegir el tipo de calefacción si nuestra vivienda está en un bloque de pisos. Veamos la diferencia entre calefacción central e individual, las dos presentan actualmente unas ventajas y desventajas a tener en cuenta, además de una eficiencia diferente dependiendo del tipo de vivienda que tengamos.
¿Qué es la calefacción individual y central?
La calefacción individual es el sistema independiente que se instala en una vivienda. Con el se obtendrá la demanda de calor y ACS que se requiera en dicho hogar, pagando por ese consumo o uso individual.
Hay una amplia variedad de sistemas de calefacción en donde elegir el que mejor pueda abastecer a la vivienda, siempre y cuando se pueda adaptar al tipo de bloque de viviendas donde se sitúe.
El sistema más habitual suele ser la calefacción con calderas de gas natural, que permiten un consumo más económico, y donde actualmente existen opciones como las calderas de condensación, las cuales ofrecen una máxima eficiencia en el sistema, además de una menor emisión de gases al medio ambiente.
Otra opción que podemos encontrar es la calefacción individual eléctrica, que ofrece un servicio continuo para proporcionar calor y ACS, aunque es una alternativa que requiere tener una buena potencia eléctrica, y sus costes en la factura de la luz pueden ser algo elevados.
Por otro lado, la calefacción central es un sistema con una caldera de mayor tamaño, la cual proveerá de suministro a todas las viviendas del bloque, dividiendo el coste entre la comunidad.
Diferencia entre calefacción central e individual
Como hemos comentado, la calefacción individual tiene una caldera propia, mientras que la central dispone de una caldera mayor para toda la comunidad.
En la calefacción central, al tratarse de una única caldera, nos podremos olvidar del mantenimiento y diversas revisiones que requiera (encargándose de su gestión el correspondiente presidente de la comunidad), y realizándose una única revisión para todas las viviendas. Por otro lado, en la calefacción individual tanto el mantenimiento como las revisiones serán responsabilidad del dueño de la vivienda.
En la calefacción individual podrá usarse la caldera según el consumo personal de los inquilinos, adaptando el suministro como mejor convenga, lo que puede generar un mayor ahorro energético y económico. En la calefacción central, sin embargo, el uso de la caldera y su funcionamiento será acorde a lo que establezca la comunidad, lo que puede beneficiar o perjudicar a los vecinos según las necesidades que tenga cada uno.
Ocurre lo mismo con la temperatura, en las viviendas con calefacción central que son más antiguas, la temperatura era idéntica para todo el bloque, sin embargo, gracias a los termostatos se pueden regular la temperatura de los radiadores para cada vivienda. Por el contrario, en la calefacción individual se indicará la temperatura que se desee según sus necesidades.
Por último, la factura energética en las calefacciones individuales será única para cada vivienda, mientras que en la central se dividirá el gasto total entre los vecinos.
Ventajas y desventajas de ambos sistemas de calefacción
Los dos sistemas presentan pros y contras, normalmente un sistema individual nos da plena libertad para elegir el que queramos (dependiendo del tipo de vivienda) adaptando cualquier preferencia en eficiencia y ahorro. No obstante, hoy en día gracias al marco normativo de la UE, existen muchas ventajas al utilizar este tipo de sistema.
En cuanto a las ventajas, la calefacción central reduce los costes de instalación al tratarse de una única obra ya establecida en todas las viviendas, sin necesidad de nuevas reformas como pasaría con la individual. Además, al tratarse de una única caldera para toda la comunidad de vecinos, puedes desentenderte de las revisiones y el mantenimiento, y el coste se repartiría entre todos. Otro aspecto del que no nos tendríamos que preocupar es de los ajustes de la temperatura, acordando entre todos la que se vaya a establecer, aunque con los termostatos siempre podremos la temperatura si se considera excesiva.
Por otro lado, la calefacción individual permite tener un sistema adaptado completamente a las necesidades de la vivienda, consiguiendo la mejor eficiencia posible con su consecuente ahorro energético. Además, se tendrá total libertad para regular la temperatura y establecer horarios de apagado o encendido cuando convenga, y la factura energética será solo sobre el consumo que se haya hecho en tu vivienda.
Si observamos las desventajas que presentan ambos sistemas, la calefacción individual supondría un mayor gasto inicial, debido a la instalación en la vivienda, y tanto las revisiones como el mantenimiento serían responsabilidad del propietario.
Por otro lado, la calefacción central actualmente no presenta ningún inconveniente, sobre todo en viviendas de nueva construcción o donde se disponga de un sistema de calefacción eficiente. Esto es debido a que el mayor problema que había anteriormente era el reparto equitativo del importe a pagar en la factura energética, ya que podía haber viviendas que consumiesen mucho más o menos que otras, por ejemplo, apagando los radiadores, y la cantidad a pagar era idéntica al resto de vecinos. Hoy en día, sin embargo, existen los contadores individuales de cada propiedad, de tal forma que cada propietario paga solo por el consumo realizado, aunque el suministro provenga de una caldera común.
Los contadores individuales de la calefacción central
Gracias a las directivas y normativa de la Unión Europea, en post de la mejora energética en cuanto a rendimientos, eficiencia y emisiones, se puso en marcha una normativa que permite una mejora significativa en el reparto y gasto energético de las viviendas, estableciendo contar con contadores individuales en los hogares que estén utilizando un sistema de calefacción central.
De esta forma, cada vivienda se preocupará de su gasto energético aunque el suministro venga de la misma caldera común, lo que ayudará tanto al reparto equitativo del importe a pagar, como a concienciar del consumo evitando despilfarros que se transforman en mayores emisiones al medio ambiente.
Si en el bloque se dispone de calefacción central, únicamente habrá que instalar el contador en la vivienda, de tal forma que se pueda disfrutar de una calefacción individual con todas las ventajas que proporciona la central.
En definitiva, la diferencia entre calefacción central e individual a la hora de elegir una de las dos, se basará en mayor medida en las necesidades particulares de cada vivienda. Una individual siempre dará un servicio más personalizado, donde poder elegir entre novedosos productos que puedan combinarse con energías renovables, por ejemplo, con los que se consigue una menor emisión de gases, una mayor eficiencia y un mayor ahorro gracias a las continuas mejoras en sistemas inteligentes.
No obstante, con las actuales y futuras normativas europeas, además de los avances tecnológicos de los sistemas de calefacción, la calefacción central también se presenta como una opción verdaderamente interesante.
En Warmhaus, como expertos en calderas de máxima eficiencia, recomendamos que si nos encontramos ante este tipo de decisión, contactemos con un asesor experto que conozca el mercado para elegir el producto que mejor se adapte a las características de la vivienda.